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miércoles, 15 de octubre de 2014

La Mirada del elefante

Que libró su ultima batalla

Los elefantes son animales notables. Viven en grupos muy unidos y son capaces de ayudar a animales heridos y traerles comida y agua. Muestran pena cuando un miembro de la familia muere e incluso a veces entierran a sus muertos o los cubren con hojas Mas información en Fuente: Articulo de bbc

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Bestia lo llaman algunos con desprecio, es solo un pobre animal dicen algunos en una despreciable demostración de lástima. 

Él quien es descendiente de reyes, él quien desde su nacimiento ha sufrido y ha observado durante el paso inclemente del tiempo las injusticias de la raza dominante, el hombre. Él también ha visto cosas que solo pueden ver ellos como observadores privilegiados, o no, cosas o hechos que a veces preferiría no haber visto. Porque en su "bestialidad de pobre animal" lamenta no haber podido salvar la luz de un ser, esa luz cegadora que a él le fue negada pero que es capaz de reconocer. 

El mejor de los halagos a su raza es "tiene memoria de elefante", y por raro que parezca es la frase más profunda y respetuosa que lo define.
Hoy con los surcos en su cara que parecen arrugas en la coraza de un ser viejo y desgastado, con su mirada baja porque ha tenido más fracasos que victorias; él quien tiene historias que contar pero pocos seres que sean capaces de escuchar y comprender. Este año ha librado su última batalla pero el principio de esta historia en espiral ha comenzado un tiempo atrás.
España mayo de 2011 Plaza del Sol, cientos de manifestantes reclaman por puestos de trabajo.

Elefante triste
Mirada elefante
 Evidencian su desacuerdo con los ajustes económicos del gobierno. Jóvenes arman campamentos en la plaza como si fueran nómadas, pero la intención firme es declarar su desacuerdo y pedir reformas.
En ese momento David camina con su pareja de la mano se detiene unos minutos y mira a la multitud, él ya ha vivido una crisis parecida en Argentina hace ya 9 o 10 años y los recuerdos fluyen entre laberintos de conexiones nerviosas. "¿Podemos seguir o quieres quedarte aquí?" lo interrumpe la dama "¿Qué?, ah sí podemos seguir" ella continua "Pensé que os quedarías aquí y alzarías una bandera". David no escuchaba solo caminaba y se sumergía en sus recuerdos "Parezco un perico parloteando" dijo la mujer, Santiago finalmente hablo "¿Por qué insistís en hablar con acento español?". La mujer detuvo su andar y con un tono de asombro respondió...
"Pues porque hace catorce años que vivo aquí!!!" "Ah!! claro es eso e hizo que olvidaras que viviste 22 años en Argentina" ella lo miro y pregunto "¿Qué te sucede? Nunca me habías hablado de esa forma y en ese tono" David se disculpó por su actitud y siguieron en su ruta sin pronunciar nada más hasta llegar a su departamento.
Finalmente David rompió el silencio "Estuve preso en 2001 antes de viajar a España" "¿Qué?" pregunto asombrada la mujer "En realidad estuve demorado, sino, no me hubieran dejado salir del país ni hubiera podido"
Argentina agosto de 2001 por la tarde, barrio de Recoleta. Una joven mujer de cabellos rubios como rayos de sol y cuerpo delgado casi andrógino, camina rápido por la Avenida Pueyrredón; en su rostro el maquillaje barrido, despintado, lavado por lágrimas. Sigue caminando de manera autómata como un zombi obviando semáforos y señales de tránsito, pasa por una plaza que ha cruzado cientos de veces. Mientras sube al puente que conecta el Museo de Bellas Artes con la Facultad de Abogacía choca con un hombre joven que viene en dirección contraria, cae al suelo.
"Uyyy perdoname. ¿Estas bien?" dice el hombre "Sí, sí bien" responde la joven y se levanta. Él mira el rostro angustiado de la mujer y aunque algo le dice que tiene que seguir hablando no se atreve, por timidez. La joven mujer sigue subiendo el puente él hombre toma coraje y decide invitarle un café, vuelve sobre su marcha y entonces la mujer esta al medio del puente, David ya esta cerca acelera su paso ya está cerca. Entonces la mujer sube y salta al vacío. "Noooooo!!" grita David desesperado aún a unos metros. Ella cae sobre la avenida, los autos pasan por al lado. David corre baja el puente y en medio de autos que de a poco detienen su marcha se acerca a la mujer que parece delirar en una agonía profunda. "Luci, Luci" dice la joven "Tranquila vas a estar bien" dice David con lágrimas en su rostro (él, la recuerda y la conoce pero no sabe de donde y por el momento no importa) trata de sacar su teléfono pero no quiere soltar la mano ensangrentada de la mujer. Alguien ha llamado a la policía y a la ambulancia. Pero ya es tarde, un fétido olor a azufre y sulfuro se siente mezclado con la niebla típica del invierno frío y húmedo de Buenos Aires....la joven ha muerto.
La policía pide testigos, se llevan demorado a David, como él llora, no le creen que no la conoce.
Después de horas en la comisaría entra un inspector "Listo pibe, te podes ir, ya identificaron a la chica" "Parece que se quedo sin trabajo, la pobre piba que crisis che!!". Antes de irse David le pregunto al inspector "¿Lucia se llamaba verdad?", la respuesta que obtuvo "Te lo digo de onda eso no se puede decir, pero me dio pena ver como llorabas. Mis compañeros dicen que sos marica, pero a mi me das lástima che. Se llamaba Aldana Maldonado".A la madrugada David trataba de recordar y finalmente se preguntó; será la misma nena Aldana del zoológico esa que había caído a la fosa del elefante cuando yo era chico.
La vida de Aldana, había transcurrido sin muchos altibajos entre familia y estudios (administración de empresas) hasta que ingresó a trabajar a una empresa en 1998 y continuo estudiando. Conoció a un hombre del que se enamoró perdidamente, y él de ella se fueron a vivir juntos en un departamento de la calle French. Eran tiempos difíciles pero ella era optimista, su pareja le decía que estarían juntos pase lo que pase ella pensaba, sí juntos pase lo que pase. Hasta esa tarde de agosto cuando le dijeron que la empresa se declaraba en quiebra y cuando llego a su casa su mundo se derrumbo. Una carta le decía que aquel que no la iba a dejar, sí la había dejado. Llorando corrió hasta llegar al final de su camino, finalmente se arrojo de un puente.
Aldana caía al vacío pero mientras caía veía que una nube la envolvía y veía a Luci que la esperaba, sentía un aroma putrefacto y pegajoso. "Hola hermano, finalmente estas conmigo" dijo Lucifer "Vamos ya es hora que te muestre mis dominios y vuelvas  a ver a viejos conocidos" Aldana ya no era Aldana ni humana dijo "Tanto tiempo, tanto vivir y esperar recuperar mi nombre...mis alas y...."
"Nada.." interrumpió Lucifer "Ha eso… sí él tenía tu nombre y no lo dijo. Libre albedrío hermano, un privilegio que les fue concedido a estas criaturas  algo que es bienvenido puesto que a nosotros nos beneficia. Ya lo verás mi reino esta plagado con estas criaturas quienes han cedido a las tentaciones más banales." Siguió hablando “Igual las almas que valen son las que más cuesta tener, algunos son mías casi desde que los humanos son niños y las tengo en mi libro, él lo sabe, los científicos humanos le llaman equilibrio del positivo y negativo" una risa irónica que retumbó en el universo broto de su pestilente boca y siguió hablando “Positivo y negativo, equilibrio…..sí eso. Se lo imaginan pero no lo comprenden” decía, sin embargo ansiaba poder ser solo un segundo humano y tener ese libre albedrío que según pregonaba le beneficiaba. Resentido siguió “Libre elección mi hermano, algo que nosotros no tuvimos bueno tal vez yo en algún momento, pero quien era él para no desafiarlo. Y esos humanos inmundos……..algunos se escapan. Desde que mando a su hijito querido (dijo irónico) a la tierra, ya verás a veces los tengo en un puño han hecho todo tipo de perversiones y aberraciones que a nosotros no se nos fuera perdonado pero los muy malditos  justo….justo en el último momento antes de su último mugroso aliento se arrepienten y se los él los perdona y se los lleva” prosiguió su discurso “Después yo soy el mal” rió burlón.
“¿Sebastian tenía mi nombre? y no lo dijo, maldito cobarde!!!" dijo el ser que ya era oscuro "Voy a mostrarle lo que es sufrir!!!!" agrego, "Adelante sabes muy bien lo que hacer" "De todas formas, desde que él lo dijo fuiste de mi ejercito porque, en ese mismo instante dudaste y creíste que ningún humano pronunciaría tu nombre" concluyo Lucifer y se fue.
El ser maligno cargado de ira cegado por la furia llego hasta el avión en el que viajaba ese tal Sebastian, "Humano, humano cobarde la miseria te envolverá" decía mientras con una neblina pesada envolvía la nave. Un frío ártico se apoderó del avión, y un olor alquitranado emanaba de la neblina espesa. "No puedes tocarlo, conoces las reglas!!" dijo un serafín que pasaba por ahí. "Reglas, reglas, reglas!! Claro que las conozco" "Él hace las reglas y todos obedecen!!! Claro que conozco las malditas reglas luche por él!!" gritando continuo "Yo libre batallas en su nombre, sí se las reglas. Pero sé también que un serafín no es rival para mí” dijo el oscuro de manera desafiante “Yo no soy rival para ti es verdad, mas sí conoces en verdad las reglas sabes que si vengo en su nombre él está conmigo” dijo el ángel de luz y lo miró con bondad, eso enervo más al oscuro quien dijo con rabia y amargura en su voz (disfrazada en ironía) “Tranquilo serafín no voy a tocarlo, continúa haciendo el trabajo de sirviente feliz de un amo que se dice piadoso y nos condenó” “Hoy no voy a tocarlo serafín pero voy a tenerlo porque conozco su avaricia y mezquindad su alma es nuestra!!". 
El ser de sombras tenía razón, Sebastian era débil y fácil de arrastrar a los senderos del ocaso eterno. Sebastián, quien desde esa noche fue férreamente custodiado por el ser maligno finalmente, hizo un mal negocio y se quito la vida en 2005 en Miami y ahí estaba ese que perdió su nombre y sus alas esperando ansioso en su perversión poder continuar con el tormento de esa alma de la que tanto ansiaba vengarse.

Argentina 20 de mayo de 2011 desembarcan de un avión, David su esposa y su pequeño hijo de 4 años. Volvieron solo para la boda de la cuñada de David, la tarde del sábado el abuelo propuso al niño una visita al zoológico para el día siguiente.
El domingo la familia llega al zoológico, en un momento David y su esposa dejan al pequeño con su abuelo unos minutos. El pequeño insiste en continuar el recorrido sin sus padres y él junto a su abuelo llegan al lugar donde esta el elefante el niño traspasa las rejas en un descuido del anciano y cae a la fosa. Mientras está cayendo la trompa del elefante lo abraza y no permite que se lastime, la gente grita desesperada y luego aplaude.
David y su esposa llegan al lugar hay conmoción y gritos. El niño está sentado junto al animal que exhausto se hecha a su lado y empieza a acariciarlo con la trompa.
En un flash David viaja con su mente años atrás hasta su infancia y su visita al zoológico; ve a esa nena hermosa que le había sonreído en el serpentario caer a la fosa y al elefante salvarla de la caída. El niño se escabulle de su madre y atraviesa la multitud llega hasta donde está la pequeña a la que la madre llama Aldana sin embargo, Aldana dice que la salvó Luci y no el elefante.
De vuelta a la realidad los cuidadores le devuelven al niño, sano y salvo “Habéis visto papi el elefante me ha salvado” dijo el niño. David abrazándolo susurra “Sí como a Aldana, como a …” y pronuncia algo inteligible “Solo que ella no lo vio”. Entonces David le da el niño a la madre se acerca a la jaula y dice “Gracias amigo, gracias por salvarlo ojala muchos humanos tuvieran la mitad de tu sabiduría y corazón”
“Nooooooooo!!!!” gritó ese ser que alguna vez fue Aldana y que estaba allí solo porque Lucifer la había invitado a ver a otro de sus hermanos (el hijo de David), le dijo, en realidad era por su asquerosa perversión. “Él tenía mi nombre y no Sebastian” dijo “Sí, que más te da. Esa noche que dejaste la humanidad dije "De todas formas, desde que él lo dijo fuiste de mi ejercito porque, en ese mismo instante dudaste y creíste que ningún humano pronunciaría tu nombre". El ente que alguna vez fue Aldana lo miró resignado.
“Además de todo tengo que lidiar con estas bestias que de vez en cuando me ganan la partida, ¿no te lo dije verdad?” señaló el príncipe de oscuridad “Ni alma tienen y se atreven a enfrentarme” luego caminó hasta el elefante y dijo “Empate” con sus garras rasgo la tierra y se fue junto al otro ser.
Gané esta batalla, pensó el elefante solo que no lo pudo decir. Bajó su mirada y continuó en su cautiverio.

Fin.


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