Uso cookies para darte un mejor servicio.
Mi sitio web utiliza cookies para mejorar tu experiencia. Acepto ....

jueves, 8 de enero de 2015

Las Matemáticas lo explican todo

Las Matemáticas

Tal como lo expresó Eugene p Wigner (premio Nobel en 1963):
La enorme utilidad de las matemáticas en las ciencias naturales es algo que roza lo misterioso, y no hay explicación para ello. No es en absoluto natural que existan “leyes de la naturaleza”, y mucho menos que el hombre sea capaz de descubrirlas. El milagro de lo apropiado que resulta el lenguaje de las matemáticas para la formulación de las leyes de la física es un regalo maravilloso que no comprendemos ni nos merecemos .Mas Información en wikipedia

¿lo explican todo?


Hace unos días Agustina visito el  zoológico  junto a su pequeña hija de 7 años, en un momento llegaron al lugar donde tienen a los pájaros cautivos. A la joven madre no le resultaba agradable la idea de tener seres vivos en atrapados, pero la pequeña había insistido. Cuando llego a una de las prisiones (¿concebidas para proteger?) vio una pareja de pájaros azules; entonces paro la marcha y se detuvo más tiempo que en el resto de las jaulas, los observo y dijo:
-Las matemáticas lo explican casi todo, excepto la larga vida de ese pájaro azul.
 La nena la miro  y pregunto:
-¿Qué significa eso mamá?.
-Nada linda solo una frase que solía decir tu abuela.
-¿Antes de irse al cielo mami? pregunto la niña.
-Sí hija antes de irse al cielo. Afirmo Agustina y siguió recorriendo el zoológico con su hija, pero ver esos pájaros trajo un torbellino de recuerdos.
Cuento :Las matemáticas lo explican todo
Las Matemáticas  lo explican todo
Por la noche Agustina, ya en su casa, trataba de encastrar piezas de rompecabezas en su memoria. A partir de esa frase que su madre había repetido. Cuando finalmente se proponía  dormir, no pudo conciliar el sueño. Mientras giraba en su cama y destapaba a su esposo, que descansaba a su lado, finalmente recordó la primera vez que había visto a ese pájaro azul y de un salto se levanto rápido de la cama. "¿Estás bien?" pregunto su esposo "Sí, no te preocupes dormí" el hombre sin más volvió a los dominios de Morfeo.

Agustina se dirigió a la cocina para preparase un café, pero antes paso por el pasillo donde en un placard tenía varias cajas con fotos viejas. Se preparo un café y mientras empezaba a buscar fotos encontró la primera foto de la casa de sus padres, de la habitación de sus padres. Sucedió entonces que el pájaro azul estaba allí, lo encontró.....siguió su búsqueda, dos, tres, diez, seguían apareciendo las fotos y el pájaro azul en la ventana del cuarto...en las ventanas de la casa en las ramas de los árboles del patio en los cumpleaños. Recordó que la primera vez que lo vio, no tendría más de dos años y luego era algo que pasaba desapercibido por años. Hasta que un día teniendo aproximadamente 10 años, había entrado a la habitación de sus padres protestando.
-Mami, ¿por qué tengo que estudiar matemáticas?, no me gusta- había dicho y su madre respondió:
-Porque las matemáticas lo explican casi todo, excepto la larga vida de ese pájaro azul- y habían reído juntas...
Luego empezaron a resolver el problema matemático juntas, su madre era arquitecta, pero antes de recibirse había dado clases de matemáticas (como profesora en varios colegios secundarios). Agustina recordó mañanas de verano donde por no haber rendido bien los exámenes de matemáticas, su madre le explicaba y el pájaro azul las acompañaba. La mujer recordó una conversación con su madre por esos días, le pregunto por qué si le gustaba tanto enseñar no lo hacía más; su madre le había contado que una vez había vuelto a enseñar y luego dijo nunca más. En ese instante el pájaro azul se poso en la mesa del patio y pareció mirar a su madre pero solo era su imaginación, pensó Agustina.
 -¿Mami y si le ponemos nombre?- dijo.
-¿Qué, a quien?- 
-Al pájaro ma".- La madre la miro seria y dijo:
-De ninguna manera, él es libre-. Fue la única vez en su extensa vida (en lo que recordaba Agustina) que lo oyó trinar. 

Nada más cierto que para algunos mortales las matemáticas explican todo. Algunos sostienen que es un lenguaje universal, incluso capaz de conectar dimensiones o mundos paralelos. Mundos infinitos....de realidades alternas......otros dicen que las ecuaciones matemáticas son el fruto prohibido del conocimiento que menciona la Biblia. Casi todas las civilizaciones basaron gran parte de su grandeza en las matemáticas. Pudiera ser que esto respondiera las dudas y preguntas de Agustina quien sabe, ella no era amiga de los números ella era abogada.
Agustina finalmente cayó vencida, por el cansancio sobre la mesa llena de fotos. Esa noche tuvo un su sueño largo y profundo, donde se traslado años atrás como una observadora que no interviene en la historia estuvo en tres lugares en su sueño. Primero en una escuela de San Isidro donde una coqueta mujer, delgada de no más de un metro y medio, cabello castaño piel blanca y ojos grandes entraba a un salón de clases. Segundo en la plaza del congreso donde esa mujer con unos años más (10 más o menos) hablaba y caminaba hacia la confitería El Molino con un joven de traje, cabello crespo, castaño y ojos grandes y que en su amplia sonrisa mostraba un diastema (algo particular)Agustina los observaba pero no podía escuchar nada. Por último se encontró en el cuarto de su madre, en la casa de San Vicente, entonces la vio en sentada en la cama...era de noche solo velas alumbraban la penumbra, lágrimas caían en el rostro de la madre. Agustina quería abrazarla en el sueño, pero no podía. Siguió mirando la escena, vio que su madre se levantaba y acariciándose el vientre tomaba un vaso con agua.
El sueño continuo, como en un remolino de nubes la noche se transformó en día y los muebles cambiaron de lugar. Entonces su madre le habló y le dijo:
-Hola hija, ven no tengas miedo-. Se abrazaron en el sueño como lo hubieran hecho en la realidad 
-Hola mami-. Dijo Agustina y se sentó en la cama, la madre le dijo voy a contarte una historia.
El sueño a partir de allí siguió con el relato de la madre, quien tenía a su hija recostada en su pecho.
-El pájaro azul te trajo hasta acá-. Dijo la madre de la mujer.
Entonces comenzó su historia: